Trial de Clásicas

		Picassent	15 de diciembre, 2002
*3ª de 3*	*Valencia*
El tiempo decidió			Texto: Horacio San Martín Fotos: Laura Corredera

Comenzamos por la categoría de las motos más clásicas, la Pre-72, que era quizás la que contaba con más bajas, ya que sólo cinco pilotos acudieron a Picassent: los de Montesaweb Joan Cañellas y Pim Terricabras, los madrileños de Triumph Manuel Casado y Enrique Echezarreta y el de Todotrial con BSA Ramón Sallés.

Ausencia por lo tanto de pilotos importantes como los bultaquistas de Classic Team Josep Soldevila y Lluís Galvany, o el otro hombre de Montesaweb Joan Puigferrer.

En Valencia las zonas para esta categoría se mostraron ideales especialmente para las motos más modernas, mientras las viejas pre-65 británicas de 4 tiempos tuvieron las cosas más complicadas, especialmente las Triumph Tiger Cub de Echezarreta y Casado que mostraban su falta de fuerza en algunas ascensiones.

Casado se tenía que retirar a causa de problemas mecánicos, mientras Echezarreta se quedaba muy retrasado, primero para ayudar a su compañero y segundo porque le resultaba imposible realizar la interzona a ritmo de enduro, cosa totalmente necesaria si no se quería penalizar por tiempo, al final penalizaba nada menos que 30 puntos por tiempo y cerraba la clasificación en cuarto puesto. Ramón Sallés también tenía que apretar, pero sólo llegaba un minuto tarde y colocaba su BSA en tercera posición, lo que le daba también la tercera posición en la clasificación final de la Copa de España por delante de Echezarreta, Soldevila y Puigferrer.

Los pilotos de Montesaweb de nuevo eran claros líderes y no tenían ningún tipo de dificultades, enfrascándose en un duelo particular en el que nuevamente Joan Cañellas, nieto del señor Permanyer, fundador de Montesa, se alzaba con la victoria al marcar tan sólo cuatro puntos, tres menos que Terricabras. El alto nivel de estos pilotos les hubiese situado también como vencedores en trialers, verles pasar por las zonas era un bonito espectáculo, tanto por su calidad de pilotaje como por la belleza e impecable restauración de sus Cota 247 primera serie. La clasificación de la Copa quedaba, por tanto, del mismo modo con Cañellas vencedor seguido de Terricabras y Sallés.

En la categoría más numerosa se daban cita una veintena de pilotos, pero también eran muchos los que habían acudido a las dos citas anteriores y no lo hacían en esta ocasión. Sin embargo esta circunstancia se vio compensada por el gran número de pilotos valencianos que se animaron a tomar parte en el trial y que no se habían dejado ver en las pruebas anteriores. El número de participantes locales fue superior al previsto y esto es buena muestra de que el trial de clásicas en Valencia también está ganando cada vez más popularidad.

Quizás esta fue una de las categorías más perjudicadas por el grave error organizativo en cuanto a la falta de tiempo, y es que aquí hay muchos aficionados que van a estos triales para disfrutar tranquilamente de una jornada de trial clásico, con zonas accesibles y sin agobios. Pero si empieza la presión, las prisas y el disfrute del trial se convierte en sufrimiento para darse la máxima prisa porque es imposible llegar a tiempo, entonces ya no es lo mismo.

Y es que en la categoría de trialers penalizaron todos los pilotos por tiempo excepto tres, precisamente los tres primeros clasificados, por lo tanto el tiempo fue decisivo. Además hubo bastantes retirados. Como ya hemos dicho el tiempo era realmente escaso y muchos estaban aún finalizando la primera vuelta cuando en su reloj veían cómo les faltaban menos de 50 minutos para realizar un segundo giro completo, y en la primera pasada habían invertido más de tres horas. Además el recorrido de la interzona era largo y complicado, por lo que finalizar a tiempo era totalmente imposible. Los pilotos que desde el principio se fueron adelantando, bien porque preveían el desastre o bien porque no necesitaban examinar las zonas demasiado fueron los beneficiados, pero tampoco se libraron de tener que correr.

Francesc Estrada llegaba como líder y principal favorito, seguido en la general de José Luís Rodríguez y Josep Pujol. Pero en esta ocasión se les uniría un rival de altura, Josep Manzano Senior, campeón de la categoría en la Copa Catalana.

Así la lucha se presentaba más reñida que de costumbre. Pero pronto Estrada tomaba una ligera ventaja sobre su bonita Ossa amarilla, tanto en puntuación como en tiempo, siendo esto último tan importante como lo primero. José Luís Rodríguez poco a poco le iba comiendo terreno y le superaba en penalización, pero sin embargo era uno de los pilotos más retrasados, y es que con más de 50 años y una lesión permanente en un pie, ver las zonas lleva su tiempo, cosa que no estaba permitida en este trial. Esto le costaría el triunfo.

Tras estos dos pilotos la lucha era muy cerrada entre Domingo Miguel Sanfélix, Josep Manzano, Javier Conde y Xavier Arenas, todos ellos en un estrecho margen de puntos en el que nuevamente el cronómetro sería quien decidiría todo.

Francesc Estrada era finalmente vencedor con 12 puntos, en segundo lugar se situaba Domingo Miguel Sanfélix con 23 y cerraba el podio Josep Manzano "Senior" con un puntito más, los tres sin sumar penalizaciones por tiempo. José Luís Rodríguez entregaba una tarjeta con 10 puntos de penalización, el mejor parcial, que le hubiese situado como vencedor, pero llegaba 16 minutos tarde, sumando otros tantos puntos a su tarjeta y dejándole en la cuarta plaza. Javier Conde y Xavier Arenas estaban a continuación, ambos con 5 puntos por tiempo, de no ser por ellos hubiesen estado en el podio. Otro de ls grandes perjudicados fue Josep Pujol, que partía como uno de los favoritos pero finalizó noveno con nada menos que 47 puntos, de los que 30 fueron por tiempo, como veis el cronómetro jugaron un papel decisivo en este trial. ¿Fue esto un trial justo? Pensamos que no, el tiempo debe decidir las clasificaciones en un enduro, no en un trial.

En la general Francesc Estrada obtiene el campeonato, José Luís Rodríguez es segundo y cierra el podio Josep Pujol, por delante de Javier Conde.

En la categoría Expert había un claro favorito, Miquel Cirera, que llegaba a Picassent con dos victorias y el resto de rivales ligeramente distanciados. Tras el jefe del Team Montesa - HRC la cosa estaba mucho más apretada, con Joan Figols en segundo lugar, el de Todotrial Horacio San Martín tercero y Josep María Capdevila, de Classic Team cuarto, todos ellos en un margen de sólo 5 puntos. Capdevila quedaba fuera de la lucha al no asistir a Valencia, al igual que otros pilotos con posibilidades de hacer un buen resultado, como el otro piloto de Todotrial Ignacio Manzanero o Joan Gaspar.

Finalmente la participación quedaba más escasa que en las Becerril y en Sant Feliú, con un total de 8 pilotos y ninguna novedad. Al igual que en el resto de categorías, las zonas estaba realmente bien marcadas, muy técnicas y clásicas, sin pasos ratoneros o demasiado peligrosos pero en los que había que trabajar mucho para lograr el cero. La primera zona era un aperitivo para todas las categorías pero después las cosas se complicaban más haciendo el trial muy bonito y selectivo, con zonas variadas en las que los pilotos más completos se podrían destacar sobre el resto.

En esta categoría los problemas con el tiempo fueron incluso mayores que en las anteriores, primero porque las zonas tienen más pasos obligados, por lo tanto son más largas, más complicadas, lo que lleva un mayor tiempo para examinarlas, y en segundo lugar porque salían tras el nutrido grupo de Trialers, formándose algunas colas en la entrada a algunas zonas, que en algunos momentos provocaban los nervios y desesperación de los pilotos, que por mucha prisa que se diesen veían como la lucha contra el cronómetro se había convertido en el objetivo principal de este trial.

Tan sólo Miquel Cirera se libraba de penalizar por tiempo, fue de los primeros en afrontar las zonas y pronto fue distanciándose del resto, tanto en puntos como en tiempo, sin duda hizo notar su gran experiencia en el mundo del trial. El resto de pilotos cometía abultadas penalizaciones por tiempo, la menor era la de Joan Figols (6 minutos) y la mayor la de Horacio San Martín con 25.

Al final Cirera sumaba su tercera victoria consecutiva marcando un total de 27 puntos y con ello se hacía con la Copa de España cómodamente. La segunda plaza era para el simpático Josep Mª Colillas y su Cota 242 con 51 (once de ellos por tiempo) y cerraba el podio David Rovira con la Merlín Gallach Réplica y un total de 52 penalizaciones, 16 por tiempo. El desenlace por el subcampeonato final era decidido por las penalizaciones de tiempo a favor de Joan Figols que pese a sumar 61 puntos sólo 6 eran por tiempo, mientras San Martín se retrasaba demasiado llegando a meta 25 minutos tarde y sumando así 68 puntos que le daban la tercera plaza del campeonato.

Pere Arnau finalizaba sexto tras una serie de problemas mecánicos, Bosco Lladó era séptimo también tras sufrir algún problema que le retrasó mucho y Francesc Sobregrau se retiraba de la prueba.

En Master Ramón Membrives partía con claras opciones de hacerse con el campeonato al tener acumulada una buena ventaja sobre los demás, por lo que la atención estaba en ver quien se haría con el subcampeonato, ya que éste estaba realmente apretado, con tres pilotos empatados a puntos: Masjoan, Rovira y Sirvent, la emoción estaba asegurada.

Pero además había algún ingrediente más que haría la cosa aún más interesante y esto era la participación de dos pilotos valencianos de máximo nivel, por un lado el campeón de España Senior B, el piloto Todotrial Héctor Escorihuela, y por otro lado Aitor Antón. Escorihuela partía con una bonita Ossa verde que había estrenado el día anterior, y Antón con una preparadísima Bultaco Sherpa azul.

Se trataba de la primera vez que estos dos pilotos cogían una clásica, pero ya se sabe que los pilotos de altísimo nivel se adaptan a lo que sea, y este caso no fue una excepción, Hector y Aitor pasaban por las zonas de un modo espectacular, como si estuviesen pilotando el último modelo de Gas Gas o Beta, haciendo giros en el aire o cambios espectaculares, picados de embrague y todo tipo de técnicas modernas. Sin embargo mientras en algunos momentos ese pilotaje moderno se mostraba muy efectivo, en otras muchas ocasiones se volvía en contra de estos jóvenes pilotos haciéndoles cometer algunos fallos tontos e innecesarios. Pero el objetivo era la diversión, y desde luego se estaba cumpliendo.

Pese a todo, los expertos de la categoría con Membrives a la cabeza no estaban lejos de los dos pilotos valencianos y les pisaban los talones. Antón sufría un golpe que rompía el guardabarros trasero de su Bultaco y poco después reventaba varios radios de la moto, dejándola inservible, lo que le obligaba a retirarse de la prueba, y es que desde luego no se pueden ir dando saltos con una Sherpa de 90 kilos como si se tratase de una moderna 2003.

El estilo de pilotaje clásico de Membrives se estaba mostrando tan efectivo como el moderno de Escorihuela y al final el catalán marcaba un punto menos que el valenciano, pero de nuevo las penalizaciones por tiempo serían decisivas. Membrives llegaba ocho minutos tarde viéndose relegado al tercer puesto, mientras el de Todotrial llegaba justo, al igual que Joan Masjoan tras una impresionante carrera por la interzona digna del más rápido enduro.

Al final la victoria era para Héctor Escorihuela con 48 puntos, en segundo lugar finalizaba Joan Masjoan sobre su Sherpa 6 marchas con 53, quedando Membirves tercero con 55. Rafael Sirvent era cuarto con 62 y tras él finalizaban Salva y Jordi Rovira.

En la clasificación final del campeonato, Membrives se hacía con la victoria, Masjoan con el segundo puesto y Sirvent cerraba el podio por delante de Salvador Rovira.

Se ponía así punto final a una interesantísima Copa de España de Clásicas que en su nuevo formato, con tres pruebas puntuables ha ganado muchísimo, tanto en interés, como en participación y difusión, logrando que el interés por el trial clásico se siga extendiendo por todo el país y haciendo una magnifica promoción de esta otra manera de disfrutar haciendo trial. Pese a ser la primera vez en que la Copa se ha disputado a varias mangas, el éxito ha sido total. Tan sólo se han dado algunos errores organizativos de juventud por parte de las organizaciones, totalmente comprensibles teniendo en cuenta lo novedoso del certamen, que a buen seguro se corregirán para las próximas ediciones.

El balance final es totalmente positivo y esperemos que en el futuro la Copa de España de Clásicas siga por este buen camino.

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Nueva victoria para Joan Cañellas en Pre-72	Pim Terricabras volvió a ser segundo en Pre-72


José Luís Rodriguez hubiese vencido de no ser por la penalización de tiempo	Muchos pilotos valencianos se apuntaron en Picassent


Nueva victoria y título para Miquel Cirera	El espectacular Pere Arnau de nuevo tuvo problemas

CLASIFICACIONES COMPLETAS
Clasificaciones Picassent	Clasificaciones Campeonato