El trial de Maeztu, esta vez con sol y calor
La penúltima cita de la Copa de España de Trial de Clásicas se disputó en Maeztu en un día completamente diferente al de las anteriores ediciones, esta vez el sol, el calor y el terreno seco hicieron que el trial fuese más llevadero pero no menos selectivo. Por tercer año consecutivo Maeztu acogía una cita de la Copa de España de Trial de Clásicas, y como se suele decir, a la tercera va la vencida, ya que por fin este año no fue una prueba pasada por agua sino todo lo contrario. El Moto Club Más Gas volvió a esforzarse al máximo para agradar a todos los participantes con un bonito trial y zonas lo más clásicas y trialeras posibles, y lo volvió a conseguir. Además lo hizo inundando la localidad de un atractivo ambiente festivo durante todo el fin de semana. Y es que los encargados de la organización hicieron las cosas a su manera, que no es otra que disfrutar durante una vez al año de preparar un evento a nivel nacional y movilizar a todos para tomárselo como si fuesen "las fiestas del pueblo".
Así tanto durante los momentos de marcaje del trial como el sábado con la llegada de los pilotos y el domingo durante y después del trial, el ambiente fue magnífico. El bar restaurante Izki, así como otras terrazas de la localidad se convertían en el centro neurálgico en el que participantes, acompañantes y organizadores compartían animadas charlas en las que no faltaron las copas y la cerveza. Como hemos dicho esta vez el cielo gris y la lluvia dejaba paso a un esplendido cielo azul, en el que el sol brillaba con fuerza ofreciendo temperaturas cercanas a los 30 grados. Durante la tarde del sábado se realizaban las verificaciones dentro del Frontón Municipal, donde como en los años anteriores también se situaba el parque cerrado. Al frente de la mesa de inscripción estaba una vez más el siempre amable Josep María Serra, que atendía junto con el representante de la Federación Vasca a todos los inscritos. Hablando de inscritos, esta vez no hubo muchos, por un lado la influencia de la crisis, por otro los excesivamente altos precios de las inscripciones y quizás también la numerosa actividad en cuanto a triales de clásicas que se presenta en otoño hicieron que apenas se llegase a los 60 participantes, de los cuales una decena no puntuaban para la Copa de España, inscribiéndose directamente en la Federación Vasca y ahorrándose 23 euros.
Se echó en falta a muchos pilotos que sí estuvieron en las ediciones anteriores, este año fallaron muchos madrileños y catalanes, también están fallando en todo el campeonato los gallegos, al parecer a causa de problemas federativos que no agradan a los participantes "clásicos" y están perjudicando la implantación del campeonato gallego de clásicas, que con tan buen pie había comenzado el año pasado. Quienes no faltaron fueron una representación de Baleares, a pesar de que son los que se encuentran más lejos y más difícil lo tienen para desplazarse. La fiesta y las copas continuaron durante la tarde del sábado, enlazando con el concierto que se había preparado en el interior del bar Izki, y que quizás no fue demasiada buena idea, ya que en vez de atraer a los pilotos les ahuyentó, desplazándose a cenar en otros lugares y levantando las quejas de los que tenían alojamiento allí, aunque por suerte para ellos se cumplió la palabra de que el concierto terminaría a las 00.15 horas.
El domingo la prueba comenzaba a las 9:30. El recorrido era el mismo de los años anteriores, unos 10 kilómetros por los montes de la montaña alavesa que rodean Maeztu, subiendo por los bonitos paisajes de bosque para volver después al pueblo donde se encontraban las 4 últimas zonas. El trial constaba de 12 zonas que debían recorrerse en dos vueltas, con un tiempo máximo de sólo 4 horas, bastante justo pero que finalmente no dio demasiados problemas, aunque hubo que ir muy ligero para llegar a tiempo. Suerte que no había demasiados pilotos y que el pelotón se estiró tras la primera zona, con lo que no hubo colas significativas. Sí las hubo en la primera zona, donde en unos minutos se juntaron gran número de pilotos debido a una salida muy continuada, pero poco a poco se fue "estirando la carrera". Con el terreno seco el trial cambiaba completamente respecto de las dos ediciones anteriores, aunque las zonas estuviesen marcadas en los mismos lugares y algunas tuviesen muchos pasos idénticos. Esta vez las zonas de piedra pasaban de ser imposibles por patinar como el jabón a ser las más adherentes y sencillas, mientras sucedía lo contrario en las de tierra, en las que la adherencia era algo peor debido a lo blando del terreno.
La agradable
temperatura, quizás demasiado calurosa, ayudaba también a que la
sensación fuese de un trial bastante menos duro que los de 2010 y 2009.
La única pega era el polvo en algunas partes del recorrido, ya que lleva
mucho tiempo sin llover. Numeroso público quiso acercarse a ver el espectáculo, especialmente en las zonas 9 a 12, situadas en la parte trasera del pueblo. Lo técnico y largo de las zonas había obligado a entretenerse bastante en examinarlas durante la primera vuelta, por lo que hubo que correr bastante en la segunda, que algunos tuvieron que hacer en menos de una hora, encontrando además algunas colas pequeñas de 2 ó 3 pilotos pero que ralentizaban la marcha. Al final hubo algunas penalizaciones de tiempo pero pocas.
Como curiosidad citar el impresionante aguante y buen trabajo de los controles vascos, ya que algunos de los cuales estaban con evidentes copas de más durante el trial tras una noche de fiesta y pese a todo no se les escapaba ni un pie ni fallaban al picar la tarjeta. Tras concluir el trial se procedió a la entrega de premios frente al frontón y después no faltó el detalle del aperitivo, donde se pudo beber y comer para reponer las fuerzas tras la calurosa jornada. Para el año que viene los hombres del Moto Club +Gas prometen volver a la carga con un trial aún mejor y en el que esperan tener más inscripción, y para ello nada mejor que un Dos Días de Trial. Tras la cita de Maeztu, sólo queda una prueba para finalizar la Copa de España 2011, será en la localidad leonesa de Pobladura de las Regueras, dentro del Dos Días de Trial, del que ya tenéis información previa en el reportaje publicado aquí, en Todotrial.com.
Ya hace falta una revisión del reglamento técnico
Tras el debate resurgido en el foro clásico de Todotrial.com, parece cada vez más evidente que hace falta ampliar el reglamento técnico, al igual que existe un reglamento técnico muy claro en especialidades como velocidad o enduro. En la categoría azul preocupa cada vez más la falta de participantes. Son muchos los factores que influyen, como los de la bajada general de inscripciones ante la crisis económica, a lo que no ayuda nada los precios demasiado elevados de inscripciones y licencias, o la dificultad cada vez mayor de las zonas, sobre todo tras la desaparición del nivel rojo o Master, que antes era el superior. Pero también ha habido muchas quejas sobre la falta de un reglamento técnico que regule más clara y contundentemente las modificaciones que se pueden hacer en las motos, de echo algunos de los pilotos antes habituales se quejaba incluso del nivel de preparación exagerado de su propia montura, alegando a que si se permiten cosas así todos lo harán o acabarán haciendo y con ello desvirtuando el trial clásico. Algo que pasa en todas las categorías pero que quizás en azul es más influyente debido a la dificultad de las zonas y a la falta de un reglamento más estricto.
Los pilotos habituales otras temporadas han ido desapareciendo, y algunos se han ido pasando al nivel verde. También algunos opinan que en Expertos debería caber una categoría Pre 80, para animar la participación, cosa que ya hemos dicho en este medio en anteriores ocasiones. Lo que está claro es que ya va siendo hora de revisar y ampliar el reglamento técnico, para evitar discusiones, malestar y decadencia en el trial de clásicos, que lleve a disminuir las inscripciones. Y es que aunque el ambiente en los triales de clásicas sea magnífico y todo el mundo se lleve bien, también hay malestar subyacente con todo este asunto. Está claro que si no hay límite al "todo vale" cada vez se irá a más y la espiral puede ser muy peligrosa, por lo que las decisiones han de tomarse antes de que sea tarde. Pensar que todo vale para que haya más inscripciones y más recaudación es un error que a la larga puede salir caro. Hace falta poner normas y límites, como en todos los órdenes de la vida, y si estos son lógicos y bien hechos las ventajas serán evidentes.
Expertos
Como hemos dicho, el número de participantes en Expertos disminuye desde hace varios años y hay que tomar medidas para que se recupere, medidas como las del reglamento técnico o el nivel de las zonas homogéneo y accesible, o incluso una categoría Pre 80 u otra de "Preparadas". Si además tenemos en cuenta que ya no existe Master, más evidente es aún la disminución de participación, y ya quedan muy lejos los tiempos en los que en Expertos había 15 ó 20 pilotos incluso con monturas como Sherpa 159, 199, Ossa Mar o Cota 247. Decimos esto ya que se acerca el final de año y será el momento de revisar todas estas cosas velando por que el trial de clásicas funcione como en otros países (en el próximo trial de Ventoux, en Francia, hay más de 400 solicitudes para participar). Pasando ya a lo que fue este nivel en Maeztu, las zonas fueron muy técnicas pero sin peligro, aunque todas ellas eran bastante clásicas también eran exigentes haciéndose necesario el uso constante del embrague, algo no tan habitual en los triales de clásicas.
El piloto vasco Diego Urreta con su Fantic se mostraba muy superior al resto con unas penalizaciones bajísimas de sólo 2 y 3 puntos en cada vuelta, lo que le daba una contundente victoria sobre el local Armando Ugarte, también con Fantic, que aprovechó su conocimiento del terreno y su gran nivel para tratar de apretar a Diego, aunque el esfuerzo fue finalmente en vano, eso sí, con 19 puntos lograba imponerse ante el más veterano de la categoría, el catalán Ramón Membrives, con su SWM 320, que completaba el podio con un total de 25 penalizaciones. A punto estuvo de haber podio vasco completo, ya que Francisco Javier Aldecoa, también con Fantic, quedaba cuarto empatado a puntos con Membrives, pero con menos ceros en su tarjeta, 14 frente a 9 ceros. El resto estaban más atrás, con el aragonés Mike Antequera (Fantic) quinto ya con 41 penalizaciones, seguido del valenciano Germán Barrios (Fantic), el madrileño Horacio San Martín (Fantic) pero sin puntuar en la Copa y cerrando la tabla el de Maeztu Fernando Echezarra, también con Fantic, y es que salvo la SWM de Membrives la categoría parece una copa monomarca.
Pre '80
Nueve inscritos en esta categoría que ha de superar los pasos verdes, y también victoria para un piloto vasco, ya que el apretado triple empate a 15 puntos se resolvía a favor de Iñigo Ucelay (Bultaco) al contar con más unos que el catalán Angel Magriñá (BSA) ambos con igualdad de ceros, mientras con dos ceros menos que ellos cerraba el podio otro catalán, Kiku Carbonell (Bultaco). Con 20 se colocaba en cuarto lugar el madrileño Carlos Varadé seguido de cerca por Lluis Galvany (22) y Rafael Caballé (27), todos ellos con Bultaco. Trialeros En la otra categoría de nivel verde, los 12 participantes también vieron una ajustada lucha por la victoria entre cinco pilotos. Al final también empate, a 9 puntos, y recuento de ceros para resolver el ganador, que se iba para levante, ya que Gabriel Dasi (Fantic) contaba con 21 frente a los 16 del vasco Carlos Alzola (Fantic).
Con sólo un punto más cerraba el podio el madrileño Julio Fernández de Caleya, con el mérito añadido de competir con una moto prestada, una Fantic 240 en sustitución de su habitual Bultaco Sherpa. Con un punto más, 11, se quedaban fuera del podio el valenciano Alberto Selma y el catalán Francesc Santos, y algo más atrás estaban los también catalanes Jaume Vila y Blai Jové. Pre '72 Pasando a las categorías de nivel amarillo, la de motos más clásicas, se demuestra que ha sido un acierto que esta categoría pase a ser amarilla y no verde, pues aunque en este trial hubo poca participación, se presentaron 7 pilotos en pre-72, que aunque no es una gran cifra está por encima de años anteriores. Aunque quizás los pilotos punteros se quejaron de zonas algo fáciles y echaron a faltar algunas más selectivas que aumentasen las diferencias.
Y es que aquí también el resultado fue muy apretado, con los cinco primeros en un margen de sólo 6 puntos. El podio esta vez fue totalmente catalán, siendo la victoria para Xavi Ribot sobre su bonita Dot Pre'65 con sólo dos puntos. Segundo era Josep Puig sobre Bultaco, con 5, y tercero Josep Soldevila con 7, también con Bultaco. A un solo punto del podio se quedaban Javier Gil (BSA) y Victor Martín (Bultaco), en este orden, y algo más atrás finalizaban Enrique González de Castejón (Ossa) y Antonio Díaz. Clásicos Como siempre la categoría de Trialeros fue la que reunió más inscritos, 14, y también aquí la lucha por la victoria fue ajustadísima, más aún que en el resto de categorías ya que había empate a un solo punto entre José Mª Martínez Anaya (Fantic) y José Luis Rodriguez "El Puma" (Montesa) que finalmente quedaba en ese orden. Completaba el podio Juan Domingo Sanfelix (Ossa) con 7 puntos. Néstor López (Honda) esta vez tenía que conformarse con la cuarta plaza, seguido de José Antonio de la Fuente (Bultaco), Juan Carlos Avila (Honda).
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