Campeonato de España

		Baiona	24 de marzo, 2002
*2ª de 8*	*Pontevedra*		*Senior A, B, C, Junior*
Cobos vence en un trial de gran belleza			Texto y fotos: Horacio San Martín

El Campeonato de España promete ser tan emocionante o incluso más de lo que ha sido el mundial indoor, muchos pilotos de altísimo nivel optan a la victoria, y en esta ocasión fue David Cobos quien se la llevó, dejando en segunda plaza a un Albert Cabestany que hubiese ganado de no ser por una sanción de cinco puntos extra impuesta por un control de zona. Cerró el podio Marc Colomer, en un trial que gustó mucho a público y pilotos por la belleza del entorno y de las zonas.

La segunda prueba del Campeonato de España, primera para los Junior y Senior C, llegaba a tierras gallegas, y concretamente a Baiona, una bonita villa costera situada al Sur de la provincia de Pontevedra, en las famosas "Rías Baixas", punto de encuentro para multitud de veraneantes, que en esta ocasión también incrementaba notablemente su población tanto por motivo del trial como por aquellos que iniciaban sus vacaciones de Semana Santa. De este modo el trial volvía a Baiona tras muchos años, desde aquellos "memoriales Luís del Río" a finales de los años 70 que culminaron con una prueba del Campeonato de España en 1980.

Así Baiona disfrutaba de un ambiente fantástico, gran cantidad de gente paseaba por la calle principal, el paseo marítimo o el mismo paddock, situado en pleno centro neurálgico de Baiona, concretamente en el parque de A Palma, al pie del recinto amurallado del Parador de Monte Real y junto a la playa de la Concheira, disfrutando así de unas preciosas vistas, tanto del mar como de las murallas y de las galerías de la calle Elduayen, la principal.

Además el tiempo acompañaba, siendo totalmente veraniego, la gente pasaba la tarde y la noche en las terrazas y las playas cercanas se llenaban casi como si estuviésemos en agosto. Resultaba curioso ver las motos de trial mezclándose en el pequeño atasco que siempre había en la calle Elduayen. Pero aunque no lo pareciese estábamos en un trial, no en un fin de semana de vacaciones, así que dejemos la playa y las terrazas con vistas al puerto y vamos a lo que nos ocupa.

A Baiona se llegaba con el Campeonato recién iniciado en Valencia, y por lo tanto con muchas dudas e incógnitas por resolver. Pero el principal foco de atención era ver al recién proclamado Campeón del Mundo de Trial Indoor, Albert Cabestany, en su primera participación tras la consecución del título. En Villalonga ya había sido segundo y para Baiona el duelo sería fuerte y muchos los candidatos a la victoria. Lampkin no estaba presente, ya que tenía que disputar la primera prueba del campeonato británico, en la que, por cierto, fue segundo tras Graham Jarvis. Quien sí estaba era el subcampeón mundial Takahisha Fujinami, y la participación extranjera se completaba con dos jóvenes pilotos inscritos a última hora por Scorpa: el japonés Fumitaka Nozaki y el francés Christophe Bruand. Por otro lado comenzaban su campeonato los Senior C y los Junior, y entre estos últimos tampoco se podía hacer predicciones, pues quienes eran los primeros la temporada pasada ya han pasado ha categorías superiores.

Los hombres de la Peña Motorista Viguesa y del Motoclub Val Miñor daban el máximo y la organización habría que calificarla con nota muy alta. En primer lugar el paddock estaba en un sitio inmejorable, grande, totalmente asfaltado, con todas las comodidades y situado en pleno casco urbano, por lo que muchos pilotos sólo tenían que cruzar la calle para llegar al hotel, ir a cenar o comprar lo que fuese necesario. Una carpa gigante albergaba la rampa de salida, las tablas de clasificaciones, la zona de verificaciones y la megafonía no paraba desde la tarde del sábado, llamando la atención de numeroso público. Pero lo que más gustó a los participantes fue la belleza y selectividad de las zonas, pues la Peña Motorista Viguesa quiso realizar un trial como los de antes: larga interzona y secciones marcadas en terrenos muy variados, grandes escalones a la misma orilla del mar, tierra y piedra granítica en los bosques de pino y eucalipto, zonas de río con bonitas ascensiones por cascadas, algo de barro, y zonas de distinta dificultad, en definitiva un poco de todo, siendo un trial de gran belleza y muy selectivo, que haría estar delante a los pilotos más completos. Por lo tanto no puede decirse que fuese fácil ni que fuese difícil pues había de todo. Al final pilotos y público estaban encantados.

El domingo amanecía con tan buen tiempo como los días anteriores, aunque algo de bruma hacía que el sol brillase menos durante las primeras horas de la mañana. Quince zonas, todas naturales, componían el recorrido de unos 17 kilómetros, que podía seguirse en moto o en coche, cada grupo de zonas tenía designada una zona de aparcamiento aunque todas ellas quedaban colapsadas ante la avalancha de espectadores.

Como siempre, los Senior C y Junior y eran los que iniciaban el recorrido a las nueve de la mañana, para después salir los Senior B y a partir de las 10:07 el primer Senior A. Las dos primeras zonas estaban a 50 metros del paddock, marcadas sobre roca de mar muy adherente y con abundancia de escalones y saltos espectaculares. A un lado el público se amontonaba y al otro el mar ponía el telón de fondo.

En la zona uno el primer gran obstáculo era un impresionante escalón al que había que llegar saltando desde una pequeña rampa, para lo cual había que dar gas a tope y tirar al máximo de la moto para llegar con la rueda trasera a la cima, como puede apreciarse en las fotos. No todos lo conseguían y los mochileros tenían que esforzarse en más de una ocasión para evitar que las motos cayesen abajo tras un intento fallido. Así muchos pilotos iban cayendo y algún mochilero también, como el conductor del camión de Sherco, que se dió una buena costalada al intentar rescatar a Christophe Bruand. El japonés Nozaki no lo veía nada claro y se cortaba en el último momento, hasta que Dani Cuerdo fue el primero en llegar arriba y después también lo conseguían Escalera, Saez o Fajardo pero parando para afrontar bien el escalón y dejándose un pie en lo más alto y varios más en el siguiente paso, por lo que hasta la llegada del piloto Todotrial Josep Manzano nadie bajó del varios. Manzi penalizaba dos puntos, mientras otros pilotos de nivel incurrían en fiasco, como era el caso de Pascuet, Bilbao, Bou, Alcaraz o incluso Marc Freixa. Fujigas lograba marcar un sólo punto, pero llegaban Raga, Colomer, Cobos y Cabestany que marcaban sorprendentes ceros y arrancaban los aplausos del público. El trial estaba siendo selectivo desde el primer momento.

La zona dos, situada a escasos 20 metros de la primera, era bastante más sencilla por lo que todos los pilotos del top 10 pasaban a cero sin problemas. Demasiado tiempo habían perdido todos en estas dos primeras zonas, pues el escalón de la primera imponía respeto y nadie quería ser de los primeros en lanzarse. Las tres siguientes estaban a un kilómetro en un monte cercano, el conocido parque Virgen de la Roca, en el que una gran imagen de la Virgen presidía un lugar de gran hermosura desde cuyos miradores se tenían magníficas vistas del pueblo y el mar. La carretera de acceso estaba colapsada y las cunetas plagadas de coches aparcados. Se componían de grandes piedras de granito, con fuertes escalones que no ocasionaron excesivos problemas.

En la tres el peor parado era Pascuet con un fiasco, Amós y Manzi se dejaban dos puntos, uno Bou y Fajardo y el resto la superaba a cero. La cuatro era aún más sencilla y el cero fue la puntuación habitual, pero la quinta volvía a ser de las más selectivas y donde se dio un hecho que sería decisivo en el resultado final. Comenzaba con una rampa de tierra que finalizaba en una plancha de piedra desde la que había que saltar a una pared de piedra, muy espectacular pero sencillo, lo complicado estaba más arriba, pues la zona seguía con un complicado paso sobre dos rocas y finalizaba con una fuerte subida de tierra y raíces donde la mayoría dejaba más de un pie en la parte más alta. Allí cometían fiasco muchos, como Bou, Pascuet, Fajardo o Fujinami, otros marcaban varios (Bilbao, Manzano, Alcaraz...), Raga, Freixa y Colomer se dejaban dos puntos y quien sorprendía era David Cobos con el único cero.

Pero ¿que pasó con Cabestany? pues que se armó una gorda. Al igual que Cobos, Albert realizaba la zona impecablemente, llegando a la parte más alta sin penalizar un sólo punto, pero allí, al final, la rueda trasera se le metía en un pequeño surco, dificultad que salvaba Cabestany con un cambio lateral. En ese momento el juez de zona extendía los cinco dedos de su mano, a lo que siguió el griterío y los silbidos del público.

Como era de esperar Albert y su padre bajaron enfadados a discutir la decisión con el juez. Al parecer éste había apreciado un pequeño movimiento hacia atrás de la moto, cosa que con el reglamento en la mano sería fiasco pero que no parecía habérsele indicado a otros pilotos. La verdad es que el movimiento no había sido nada claro, se trataba de uno de esos fiascos dudosos que nunca se suelen marcar. El padre de Cabestany se ponía excesívamente nervioso y daba fuertes gritos al juez de zona, su hijo le calmaba, pero poco después se ponía igual de nervioso al ver que el control no quería escuchar sus argumentos, el público gritaba y abucheaba al control de zona. Tras varios minutos de tensión, en el que el control amenazaba con sacarles tarjeta amarilla, los dos Cabestany se sentaban en una piedra obstaculizando el paso e impidiendo la entrada de los pilotos que esperaban, más tensión, más discusiones excesivamente acaloradas, al final optaban por no empeorar las cosas y marchar pero era demasiado tarde, al final del día se encontrarían con una sanción de 5 puntos y 30 Euros que les costaba la victoria.

Las dos zonas siguientes estaban unos 500 metros más adelante, siendo bastante parecidas a las anteriores, trazadas en laderas con roca y raíces. En la sexta todo eran fiascos hasta la llegada de Amós Bilbao, que marcaba un sólo punto. Fajardo la sacaba con un varios, Raga con dos, Freixa y Cabestany repetían la hazaña de Amós con sendos unos, mientras Fujinami, Colomer y Cobos eran los únicos en lograr el cero, por lo tanto este último aún no había estrenado su marcador, y ya se destacaba de todos sus rivales.

Hasta el momento Cobos tenía cero puntos, Colomer 2, Raga 4, Cabestany y Fuji 6. En la séptima se veían todo tipo de puntuaciones independientemente de quien fuese el piloto, desde el fiasco de Freixa a los cuatro únicos ceros de Bilbao, Manzano, Raga y Cabestany, pasando por los doses de Bou, Pascuet, Fuji, Colomer y los unos de Alcaraz y Cobos, que de este modo estrenaba su tarjeta, desde luego lo estaba bordando.

El siguiente grupo de zonas era el de la 8 y 9, también de piedra con grandes escalones, aunque algo más sencillas que las anteriores. Sin embargo aquí los fallos no estaban permitidos y mínimos descuidos podían llevar a cometer un fiasco, que es precisamente lo que le sucedió a Josep Manzano. El resto de los punteros solía pasar limpiamente, salvo Cabestany, Freixa y Amós que se dejaban un punto o Fuji y Fajardo que marcaban varios. La novena, a pocos metros de la anterior, también era de piedra con buenos escalones y un vuelo final muy técnico en el que había que pasar rozando y traccionando con la rueda trasera en una roca situada de lado para poder subir más arriba. En este punto fallaban Fujinami y Amós, mientras Cobos se dejaba su segundo punto de la mañana y casi todos los demás pasaban sin problemas. En estas dos zonas los Senior C y Junior, ya en su segunda vuelta, alcanzaron a los A, por lo que se formaron algunos atascos a la entrada de las zonas y se complicó aún más el tiempo para loa A, ya que les quedaban seis zonas por realizar y ya casi habían gastado tres de las cuatro horas de tiempo límite para realizar la primera vuelta.

Las zonas 10 y 11 incorporaban nuevos elementos no vistos hasta ahora, el agua. Estaban trazadas en el lecho de un río que formaba una bonita cascada y con grandes desniveles de tierra. En la primera de ellas la mayoría pasaba sin problemas, aunque Fuji, Alcaraz, Manzi y Pascuet se dejaban un punto, y Amós y Bou marcaban su segundo fiasco consecutivo. La siguiente no sería tan fácil, los fiascos caían como moscas, hasta que Jordi Pascuet la sacaba con un varios, cosa que posteriormente también conseguían Alcaraz, Fujinami, Freixa y Cobos.

La solitaria zona 12 estaba en una llanura, muy próxima a un merendero en el que algunos espectadores aprovecharon para montarse un "pic-nic". También era de piedra muy selectiva, y las puntuaciones eran de lo más variado. Pascuet, Manzano, Amós y Bou marcaban fiasco, Fajardo varios, Cabestany dos, Colomer. Raga y Alaraz uno, siendo Freixa, Fuji, Cobos, y también Pepe Sáez los únicos en pasar a cero.

Ya sólo quedaban tres zonas, y las prisas eran patentes, todos iban mal de tiempo, por lo que apenas se detenían a mirar estas zonas, que además eran complicadas de sacar a menos de varios. También el agua y algo de barro eran los protagonistas. La 13 era de gran belleza, pues comenzaba con una pronunciada pendiente que llegaba hasta el río para después ascender por una bonita cascada en cuyo primer tramo quedaban atascados todos los pilotos cometiendo un varios, sólo dos consiguieron rebajar esta puntuación, Fajardo con un dos y Cabestany con un magnífico uno puesto ya al final de la zona una vez había superado lo más duro.

En la zona siguiente de nuevo los varios eran lo habitual, sorprendiendo los unos de Alcaraz y Fajardo y los ceros de Cabestany y Freixa. Para terminar, en la zona 15, de nuevo máxima selectividad y puntuaciones de todo tipo, pero con la prisa como protagonista. De hecho todos los pilotos penalizban por tiempo, siendo Raga uno de los mas perjudicados con nueve puntos extras.

De este modo finalizaba el primer giro con un líder destacado, David Cobos, que con 11 puntos sacaba cinco de ventaja a Raga y Cabestany, sus principales perseguidores. Colomer y Freixa les seguían los pasos, mientras el resto estaba ya bastante distanciado. Pero al parcial de 16 puntos obtenido por Cabestany se le sumaba poco más tarde la penalización de 5 puntos antes comentada, pasando a la quinta posición provisional. El peor parado era Xavier León, pes una avería mecánica en el motor de su moto le obligaba a retirarse.

En Senior B el gallego José Manuel Suárez era líder indiscutible con 17 puntos, encontrándose muy cómodo y aventajando en nada menos que 11 puntos a Hector Escorihuela, mientras su primo Daniel estaba tercero con 33. En Senior C también había un líder indiscutible, Francesc Recio con 18 puntos mientras detrás la lucha era cerrada entre el mecánico de Gas Gas Philippe Vaudey, el vigués Jorge Arjones (ambos con 23 puntos), Sergio Moreno y el nuevo piloto Todotrial Sergio Puyo (empatados a 26). Junior era la categoría con más inscritos, 25, y también una de las de mayor interés. Isaac Pons estaba líder con 24 puntos, pero le pisaban los talones muchos pilotos, el gallego Angel Leirós "Junior" era segundo con 26 y Laia Sanz estaba en tercera posición con 30, pero también acechaban José Juan, (32) y Dani Gibert (35) mientras el piloto Todotrial Dani Oliveras no tenía su día, pues era octavo y rodaba muy por debajo de sus posibilidades.

CLASIFICACION 1ª VUELTA
Pos	Nombre	Puntos	Pos	Nombre	Puntos	Pos	Nombre	Puntos	Pos	Nombre	Puntos
1	Cobos	11	6	Fujinami	26	11	Escalera	45	16	Cuerdo	53
2	Raga	16	7	Alcaraz	28	12	Bilbao	47	17	Saez	54
3	Cabestany	16+5	8	Fajardo	35	13	Bou	47	18	Antón	62
4	Colomer	19	9	Manzano	38	14	Bruand	51	19	S. León	63
5	Freixa	20	10	Pascuet	45	15	Nozaki	51	Ret	X. León	-